Jim Morrison, el icónico líder de la banda The Doors, es conocido por muchos apodos y seudónimos a lo largo de su vida, pero uno de los más famosos es «El Rey Lagarto». Este apodo no solo era una representación artística, sino que también tenía raíces más profundas en la psicología y la creatividad de Morrison.
El Nacimiento del Apodo
«El Rey Lagarto» surgió de la mente creativa de Morrison mientras estaba en una sesión de grabación de The Doors. Al parecer, estaba hablando con su compañero de banda, Ray Manzarek, sobre sus experiencias psicodélicas y su interés en la literatura, especialmente en la obra «El Reptil en el Cielo» de Jim Carroll. En ese momento, Morrison pronunció las palabras «Rey Lagarto» y nació el apodo que lo acompañaría en su carrera.
La Simbología del Rey Lagarto
Para Morrison, «El Rey Lagarto» tenía un significado simbólico profundo. Reflejaba su interés en la mitología y la espiritualidad, así como su fascinación por los reptiles como símbolos de renacimiento y transformación. Este apodo se convirtió en una especie de alter ego para él, una expresión de su naturaleza artística y sus exploraciones psicodélicas.
La Dualidad de Jim Morrison
La elección de «El Rey Lagarto» como apodo también puede relacionarse con la dualidad en la personalidad de Morrison. Por un lado, era un artista carismático y provocador en el escenario, capaz de encender a las multitudes con su presencia y voz. Por otro lado, tenía una personalidad introspectiva y a veces melancólica, interesada en temas profundos y oscuros.
El Legado de «El Rey Lagarto»
A lo largo de su carrera, Jim Morrison continuó utilizando «El Rey Lagarto» como una expresión de su identidad artística y creativa. Este apodo se ha convertido en una parte icónica de su legado y es recordado por los fanáticos de The Doors como una representación de la complejidad y la profundidad de su arte.