Este refrán se basa en la metáfora de «la cuerda» como un símbolo de las circunstancias o el ambiente en el que una persona se encuentra. Sugiere que el entorno en el que alguien vive o las personas que lo rodean pueden influir positivamente en su comportamiento y decisiones.
El Papel del Apoyo y la Comprensión
Una interpretación de este refrán es que el apoyo emocional y la comprensión de los demás pueden ayudar a una persona que enfrenta desafíos emocionales o psicológicos a mantenerse en equilibrio y a tomar decisiones más sensatas.
La Superación de Dificultades
Este refrán también implica que, incluso si alguien ha mostrado comportamientos irracionales o «locos» en el pasado, pueden superar esas dificultades y alcanzar un estado de mayor cordura y estabilidad emocional con el apoyo adecuado.
La Responsabilidad de las Relaciones
En un sentido más amplio, este refrán destaca la responsabilidad de las relaciones y las comunidades en ayudar a las personas a superar desafíos y dificultades mentales o emocionales. Puede ser un llamado a ser comprensivos y solidarios con aquellos que puedan estar luchando.