El término «psicología barata» se utiliza para describir ideas o teorías psicológicas simplistas, poco fundamentadas o que carecen de rigor científico. Se refiere a la tendencia de algunas personas o fuentes a ofrecer explicaciones o consejos psicológicos que son superficiales, clichés o sin base empírica sólida. La psicología barata puede incluir afirmaciones simplistas sobre el comportamiento humano, generalizaciones excesivas o consejos poco efectivos.